Hoy llegué aquí dispuesta a publicar algo totalmente distinto, pero al abrir la página y encontrarme con la propuesta de Saimarné me he dicho «¿Por qué no? Total, lo otro lo puedo publicar también cualquier otro día».

Así que aquí os traigo mi primer #BookTag, aunque no es un book tag propiamente dicho sino un #AutorTag.

Las normas son simples: responde todas las preguntas y, al final de la publicación, nomina a 3 bloggers (y avísales) para que puedan hacer el tag (que como bien dice la autora del mismo «no está obligado ni mucho menos, pero si entre tanto lector hay algún escritor, vamos a conocernos mejor, ¿no?»).

Pues eso, que aquí va el mío:

¿Con cuántos años empezaste a escribir? No lo recuerdo con exactitud. Sé que aún estaba en primaria, por lo que imagino que tendría unos 9 o 10.

Publica tu primer escrito (o un fragmento de él si lo consideras demasiado largo)

Esto tan bien escrito, con esta caligrafía impresionante y con tanta corrección ortográfica y gramatical (nótese la ironía) es lo único que conservo de mi primer intento de novela.

Vergonzoso, pero, ahí están mis orígenes.

Luego creo que mejoré. No sé cuál es el texto que va después, no los tengo en orden cronológico y muchos los he perdido al ir cambiando de sitio, por lo que os dejo uno de los poemas más antiguos que conservo (está en catalán, así que mis disculpas para quienes no lo entienden):

Ets tot i no ets res.

Una vida, un sospir.

El temps fugaç

passa impertorbable

donant-ho tot

o deixant-te sense res.

I la gent que passa

i no et veu.

No ets res.

I la gent que et troba

i et mira

però, com un sospir,

desapareix.

I el temps passa

i tu et quedes,

marcint-te, assecant-te,

sent tothom i no sent ningú,

veient-ho tot sense veure res.

Però ho ets tot

i, alhora, no ets res.

Tan sols una joguina del temps.

¿Por qué empezaste a escribir? Empecé de rebote. Desde que tengo uso de razón me recuerdo rodeada de libros e inmersa en sus historias. Llegó incluso a quedárseme pequeña la sección infantil de la biblioteca de mi pueblo y me autorizaron a coger libros de la de adultos mucho antes de lo que tocaba.

Sin embargo, nunca se me pasó por la cabeza que yo pudiese escribir hasta que mi amiga Estefania me confesó que lo que quería ser de mayor era escritora. Fue como un despertar, me quedé alucinada y encantada y decidí que sí, que yo también lo sería.

Y aquí sigo, con mis más y mis menos, pero sin rendirme.

¿Tienes algún proyecto literario entre manos en este momento? Siempre tengo proyectos, lo que no tengo es tiempo. He empezado varias novelas y estoy escribiendo y preparando una pequeña selección de cuentos. Además, recientemente un colega escritor me ha propuesto realizar un proyecto conjunto del que todavía apenas hemos hecho los primeros bocetos pero que pinta muy bien. Ya os contaré.

¿Tienes algún personaje literario propio como favorito? Hay uno que se apareció hace años en mi mente, ligeramente parecido a cierto pistolero de sai King, y que ahí sigue, escondido en las sombras, esperando pacientemente a veces, otras azuzándome con su espada a que escriba su historia, a que la defina y la termine. Es un personaje (y una historia) complicado. Es MI personaje y MI historia, por eso lo quiero tanto y por eso lo odio tanto. Porque es tremendamente difícil.

¿Has publicado alguno de tus escritos? A parte de los que están en el blog, tengo dos microrrelatos publicados en las selecciones de Érase una vez… un microcuento y Pluma, tinta y papel III de los concursos homónimos realizados por www.diversidadliteraria.es y un par de poemas en selecciones de la misma web.

¿Has ganado algún premio en un concurso literario? Ganar, ganar, aún no.

Obtuve el 2º premio de la categoría C del IV Concurso Literario Alcanar-Montsià y he sido seleccionada para las antologías de los concursos arriba mencionados.

¿Hay algo malo en el mundo de la literatura? Varias cosas: la dificultad por destacar y hacerte oír; el intrusismo de personas que solo escriben (o les escriben) libros porque son mediáticos y la editorial de turno sabe que se hará de oro con un libro con esa foto en la portada; la sensación de que, en los círculos literatos, solo serás considerado un buen escritor si escribes cosas profundas, realistas, «literarias», pues la fantasía y la ficción no son cultas; la opinión general de que, como no seas un super ventas, lo tuyo es un simple hobby, no un auténtico trabajo…

¿Consideras la escritura como un «trabajo fácil»? Ni en sueños. Y quien lo piense es que nunca se ha sentado a escribir de verdad. Escribir no es solo juntar palabras sobre una hoja o en un ordenador. Hay que trabajar el argumento, hay que definir los personajes para que parezcan reales, hay que investigar y documentarse, hay que cuidar las formas, hay que saber desarrollar la trama dosificando los tiempos, manteniendo la tensión en su punto justo, sin aburrir, pero sin llegar a agobiar. Quizás no sea un trabajo físico ni técnico. Quizás ninguna vida o futuro dependan de ello, salvo las del propio autor. Pero es un trabajo mental que puede llegar a agotar mucho más.

¿Algo triste en el hecho de escribir una novela? No sé muy bien qué decir a esto. Quizás lo más triste es ver que tus proyectos se estancan por cosas ajenas a ti. Que por mucho que lo desees siempre hay algo que hacer antes de sentarte a terminar un capítulo. Hay quien dice que lo triste es la soledad del escritor, ese estar delante de la hoja en blanco y con la cabeza en un mundo que solo tú conoces (casi) a la perfección y que cuesta de entender para los demás. No; para mí eso es lo bello de escribir. Lo triste es la frustración de no poder quedarte allí más tiempo, de tener que dejarlo siempre para luego porque hay que ir a trabajar, hay que hacer tareas, hay que hacer mil cosas más importantes antes que esta. Y cuando por fin tienes tu momento, la inspiración se ha ido y delante solo tienes una hoja en blanco, pocas ganas y la cabeza agotada.

¿Ves factible vivir de lo que escribes? Desgraciadamente no. Para vivir exclusivamente de lo que escribes hay que ser un escritor superventas constante, y hasta la fecha no he conseguido terminar ninguna novela. Veo factible llegar a publicar cosas, poder dedicar una parte de mi rutina laboral a ser escritora. Pero no vivir exclusivamente de ello.

Hasta aquí mi #AutorTag, espero que os haya gustado y que os animéis a hacerlo. Mis nominados son El explorador de mundos, Ara, la chica de octubre y Diario de un gato negro.
De todos modos, si alguien más lo lee y se anima, aunque no esté nominado, puede copiarlo (házmelo saber para que vaya a leerlo 😉 ).